Ojalá todas esas miradas sean para mí.
Ojalá todas tus sonrisas sean directamente proporcionales mias.
Ojalá pudiera ocupar almenos una quinta parte de tu corazón, aunque sé que es mucho pedir.
Ojalá algún día, pueda estar tan cerca de tí, que escuche los latidos de tu corazón.
Ojalá se escape de tu boca un "te quiero" o un "no te quiero perder".
Ojalá  pueda ser tuya.

Quizás todo esto, no sean más que estúpidos deseos, de una estúpida chica enamorada, que sólo intenta encontrar y conseguir lo que realmente quiere.
Y aún así no he cambiado de opinón, ni pienso hacerlo.
Sigo pensando que si persigo lo que quiero, lo conseguiré, más tarde o más temprano, pero lo conseguiré.
Al fin y al cabo lo último que se pierde es la esperanza.